Tuesday, August 21, 2012

Londres, la Babilonia moderna?


Babilonia es una leyenda que aún resuena en nuestro tiempo, a pesar de que en el año 639aC ya había perdido su imperio, y que hace siglos que fue abandonada. Largamente mencionada en el Nuevo Testamento de la Biblia, fue identificada como fuente de lascivia y soberbia, llegando a ser descrita como «La Gran Ramera». No obstante, Babilonia brilló mucho tiempo por su alto nivel multi cultural y tanto el mito de su belleza y su poder llegó a oídos de Alejandro Magno quien residió allí durante un tiempo y donde murió.

En 1847 el Primer Ministro Británico Benjamin Disraeli definió a Londres como “La Babilonia moderna”, y si bien la ciudad todavía estaba lejos de ser el gran exponente multicultural que hoy es, ya sentaba precedentes de lo que ocurriría en los próximos 150 años.

La semana pasada se transmitió por BBC un documental llamado: “Londres, la Babilonia moderna” en el cual por el lapso de dos horas describía como la ciudad se había transformado en la ciudad cosmopolita que hoy es.

En los últimos 100 años, Londres pasó de ser una ciudad habitada mayoritariamente por británicos de raza blanca a una ciudad en la cual conviven más de 50 razas y credos de todas partes del mundo y con una increíble diversidad de idiomas como ninguna otra ciudad del mundo ha demostrado tener. Aquí conviven más de 300 lenguas, 300 formas distintas de comunicarse y aun así, la lengua inglesa sigue siendo el gran aglutinante de todas ellas, el factor común.

Desde los comienzos del Siglo XX, Londres vio transformaciones que hicieron que la ciudad misma evolucionara como pocas lo hicieron en el mundo. Desde los derechos de la mujer tanto al voto como a las posibilidades laborales, la inmigración y reconstrucción de la ciudad post segunda guerra mundial, la revolución de la década del ‘60, las turbulentas y conflictivas décadas del ‘70 y ’80, la aceptación de inmigrantes de todas partes del mundo, músicos, escritores, pensadores; pero por sobre todo, la gente misma, gente como nosotros que fue formando el Londres moderno, el Londres que hoy vemos.

Vivir en Londres es aceptar distintas culturas, aceptar distintas razas, aceptar distintas formas de pensar, aceptar distintas religiones y posiblemente, ese sea el mayor legado que pueda uno recibir viviendo en esta ciudad, la multiculturalidad, la aceptación de la otra persona por lo que es, sin prejuicios y con total libertad.

Ciertamente el camino no fue sencillo y el documental así lo muestra, pero también nos permite creer que “si se puede” y tal como diría John Lennon:

Imagine there's no countries
It isn't hard to do
Nothing to kill or die for
And no religion too
Imagine all the people living life in peace

¿Utopía o realidad? … ¿Qué opinan ustedes?
Esperamos sus comentarios !!!