Esta semana me traslado a Madrid y dejamos Londres (no totalmente) solo por unos días. Por
cuestiones de trabajo, estuve la semana pasada en la capital Española y algo
muy interesante ocurrió; esas cosas que se dan muy de vez en cuando (o mejor
dicho, casi nunca) ya que me invitaron a ver al Real Madrid en el mismísimo Santiago
Bernabéu !!!
Lo curioso del caso es que la invitación era
para dos, padre e hijo y tenía que ir acompañado de mi hijo de solo dos años y
medio. Obviamente lo primero que a uno se le viene a la cabeza en ese momento es:
“¿Será
seguro para que lleve a un niño tan pequeño a la cancha?”
Luego de pensarlo y conversarlo con mi esposa,
decidimos que no habría problemas en llevarlo y allí fui, Domingo 12hrs a la
cita en el Bernabéu para ver al equipo casi campeón de Mourinho frente al
Sevilla en el que alguna vez jugara Maradona.
Con los años, muchos amigos me han hecho el
mismo comentario: “Pablo, el futbol europeo es aburrido, no tiene la misma pasión que el
argentino” … y no están errados en ese sentido. No es común ver a
setenta mil personas sentadas en perfecto orden, apoyando a su equipo pero sin
disturbios, sin vallas metálicas que los separen del campo de juego, sin policías
dentro del estadio, sin gases lacrimógenos … ‘aburrido’ dirán algunos, ‘seguro’
dirán otros. La verdad es que no pude dejar de pensar las veces que fui a la
cancha en Tucumán (en la Ciudade, claro está!) o en Buenos Aires (obviamente en
la Bombonera!) y mientras veía jugar a uno de los equipos más poderosos del
mundo, extrañaba los cantos, los bombos, las sombrillas, las banderas y como
no, los chori a la salida de la cancha !!!
En la década del 80 Inglaterra, Italia y otros países
pasaron por el mismo problema que acosa hoy (y desde hace años) al futbol
argentino: la violencia. Todos los días
leo en nuestros diarios los problemas con las barras, los equipos que las
favorecen, los enfrentamientos, las muertes y siento que es la historia de
nunca acabar. Es la historia de gente que se cree poderosa y dueña del club en
nombre de los hinchas, alimentada por los mismos directivos de los clubes y mientras veía a mi hijo disfrutando del
partido, seguía preguntándome: “¿Hasta cuándo?” … “¿Por qué se permite todo
eso?” … “¿Cuándo cambiará la historia?”
El partido terminó, ganó Real Madrid 3-0 y en
ese momento quedaba a medio paso del título, de ganar La Liga. Mi hijo y yo nos retiramos del estadio y si bien él aún no
probó el sabor de la pasión argentina en una cancha de futbol, el balance entre
la seguridad y los cambios de hace años atrás, me permitieron disfrutar de este
deporte que tanto amo junto a él.
Les dejo algunas fotos del partido y un video
del increíble estadio Santiago Bernabéu pero antes …
¿Irían o van a la cancha con sus hijos pequeños? … me interesan sus
opiniones !!!
1 PERSONAS SE ANIMARON A COMENTAR ... DEJA EL TUYO !:
Hola Pablo, es muy cierto lo que decís, pero los ingleses pudieron solucionar el tema porque ne estaba la política metida en el medio, como ocurre en nuestro país. Los hooligans (¿está bien escrito?)eran violentísimos pero privó la autoridad y el establecer precios muy altos para las entradas.
Saludos, desde BA
Post a Comment
Note: only a member of this blog may post a comment.